sábado, 21 de noviembre de 2009

OJOS MIEL vs. PESADILLA ETERNA


Solo existe una pequeña distancia al pasar del cielo al infierno en tan solo un momento. Solo quisiera apartarme del mundo por tan solo un instante.
Quisiera formar parte de un mundo en donde no hay desilusiones, problemas ni tragedias.
Te he recordado a ti que te perdí sin querer, con esos ojos miel que los guarde en ese de recuerdo de Abril. En cambio he pensado en ti y lo que recuerdo son las desilusiones que descubrí, las palabras que nunca dijiste y perdiste la confianza que te soltaba.
La causas posibles de mi cefalea, sean los recuerdos, las noticias del país, el mundo, el ajetreo, el conteo, la crisis familiar y el quiste que me ha quitado noches de sueño. He soñado en un mundo verdadero, en donde camino y solo veo verdades y palabras duras, no en un mundo en donde la gente se alimenta de engaños y disfraces.
Solo tengo dos recuerdos; el de los ojos miel y el que se volvió mentira a través del tiempo. El que me miraba de lejos y estaba prohibido, y el que con una palabra bonita me sedujo sin medida. Esos ojos miel que me abrazaba en Altamira y un bipolar que dibujaba caricias en aquella frágil avenida de mi cuerpo.
Ese gato de ojos miel que me besaba bajo la luna llena, ocultando verdades en ese silencio de primavera. Mientras tu con tus lindas palabras me matabas sin darte cuenta de cuanto te quería y te adoraba; Siendo tu una maravilla del como hacías funcionar ilusiones o esas palabras de aliento, perdiéndome de aquel sueño y encerrándome en ese extraño delirio de viernes por la noche; pensando y soñando en esas palabras que me diste en aquella mañana.
La desilusión me mata, salí de uno para equivocarme de nuevo, salí de una hoguera para encerrarme en esa pesadilla eterna. No dejo de pensar en todo lo que te di, posiblemente sin tu saberlo… Pero prefiero no hacerlo, o mejor ignorarlo, suponerlo o inventarte en un sueño por el cual nunca apareciste, haciendo que mis lágrimas salieran entre mis parpados y que guardaran un sentimiento de antaño.
Solo espero seguir en ese bosque, seguir buscando un sueño eterno, un amor verdadero, sin ser tu ese, sin ser yo esa, eso que tanto fuimos antes de ser nosotros mismos, sin ser tú y sin ser yo.

2 comentarios:

Escrituras que dejan sobre ti